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Detrás de NEOH no hay una corporación gigante que pueda permitirse el traspaso futbolístico de Neymar, sino personas reales. Una de ellas es Manuel.

Manuel es un futbolista entusiasta del Waldviertel y atravesaba regularmente el país para asistir a los partidos de su campeonato. A la vuelta, a menudo le entraba un poco de hambre, por lo que se aprovisionaba de chocolatinas en la gasolinera más cercana. Menudo dilema: el Smartwatch, que le indicaba su consumo de calorías por un lado, y las bombas de azúcar por otro.

Pero cuando Manuel volvió a pasar hambre en la gasolinera después de un partido, le remordió la conciencia. Echó un vistazo a las tablas nutricionales y, tras mucho deliberar, cogió la barrita de proteínas. Una estupidez que no le supo bien. "¿Por qué no hay una barrita que sea buena y sana?".

Manuel no soltó esta pregunta. Empezó a estudiar por su cuenta química de los alimentos y experimentó durante tres años para encontrar la receta perfecta de una barrita rica en proteínas que gustara. En el transcurso de su viaje, Manuel se hizo con más compañeros de armas: un fiestero aficionado al marketing, un gestor de proyectos que cuenta guisantes, un profesional de las ventas parecido a Monk y grandes ángeles de los negocios que han estado a su lado con consejos, acción y pasión desde entonces.

Y ahora está NEOH, y eso incluso con su propio sitio web, en el que ha estado navegando y probablemente se olvidó de que estaba a punto de pedir unas barritas por Internet. Afortunadamente, hemos pensado en ello y hemos añadido un enlace a nuestra tienda web aquí. De nada.