Los científicos identifican las sustancias químicas sintéticas en los alimentos como uno de los principales puntos ciegos de la salud pública

21.05.2025
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Los científicos destacan las pruebas del creciente impacto en la salud pública de la exposición a sustancias químicas sintéticas en los alimentos, centrándose en las sustancias químicas en contacto con los alimentos procedentes de su envasado y procesado, y su mayor presencia en los alimentos ultraprocesados. Teniendo en cuenta una amplia gama de estudios científicos e iniciativas normativas, el artículo ofrece una visión global de la cuestión, esboza las necesidades futuras de investigación y comparte las opciones existentes y los enfoques novedosos para contribuir a la transición sostenible hacia un sistema alimentario más seguro.

Puntos clave de la publicación:

  • Las sustancias químicas en contacto con los alimentos (SAQ) y el consumo (excesivo) de alimentos ultraprocesados (UPF) son un factor que no se tiene en cuenta en los problemas de salud pública, a pesar de su relación con diversas enfermedades no transmisibles como el cáncer, las enfermedades cardiovasculares, los trastornos metabólicos, las enfermedades relacionadas con el cerebro y el sistema inmunitario, y los trastornos reproductivos.

  • La contaminación por FCC se produce a través de cuatro rutas clave: transporte, procesado de alimentos, envasado y preparación de alimentos, lo que permite que sustancias nocivas como los bisfenoles, los ftalatos y los PFAS migren a los alimentos.

  • El aumento del consumo de alimentos ultraprocesados -que a menudo contienen sustancias químicas sintéticas o están en contacto con ellas- incrementa aún más los riesgos para la salud.

  • Entre las futuras prioridades de investigación se encuentran una mejor identificación de las sustancias químicas peligrosas, el desarrollo de materiales más seguros en contacto con los alimentos y el rediseño de los sistemas alimentarios para que sean seguros y sostenibles.

  • Las políticas deben centrarse en reformar la normativa sobre productos químicos, incentivar los envases seguros, reducir los residuos de envases y frenar el consumo de UPF.

"Cada vez está más claro que los alimentos ultraprocesados envasados de hoy en día son cómodos e hiperpalatables, pero contienen muchas sustancias químicas sintéticas y microplásticos de diversas procedencias", explica Jane Muncke, autora principal de la nueva publicación.

"Vemos que las repercusiones para la salud de este tipo de contaminación alimentaria están actualmente infravaloradas y poco estudiadas. Las pruebas científicas demuestran la necesidad de adoptar un enfoque holístico en la elaboración de políticas, que integre consideraciones de salud planetaria y humana, incluidos los FCC peligrosos y sus repercusiones en la salud". Todos los envases alimentarios, equipos de procesamiento y otros materiales en contacto con los alimentos deben someterse a pruebas adecuadas para comprobar su seguridad con respecto a la migración de sustancias químicas en contacto con los alimentos y microplásticos, utilizando métodos de ensayo modernos. También hay que desarrollar nuevos métodos de ensayo de la migración de microplásticos", afirma.

Nota: Este artículo ha sido traducido utilizando un sistema informático sin intervención humana. LUMITOS ofrece estas traducciones automáticas para presentar una gama más amplia de noticias de actualidad. Como este artículo ha sido traducido con traducción automática, es posible que contenga errores de vocabulario, sintaxis o gramática. El artículo original en Inglés se puede encontrar aquí.

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